Huellas sombrías

La noche es gélida, como esta realidad, reflexiono y decido regresar a casa, mucho tiempo ya había estado fuera y mis padres de seguro estarán preocupados –sostuvo meditabundo en su fuero interno–, camino por un sendero apagado; como eclipsado, canes se oyen a lo lejos con sus lastimeros aullidos, en la lontananza relámpagos de una

El hipnotizador

            Bastián estaba sumido en un dolor inmarcesible día tras día y parecía que se acrecentaba antes que disminuir ante ese apogeo llamado vida, había intentado encontrar ayuda en todas las religiones posibles, ayuda psicológica, analgésicos, barbitúricos, inyecciones, nada parecía funcionar (al menos él creía ciegamente o no aceptaba como tal la fatídica realidad) y

Sótano.

Se comentaba en cada rincón que el sacerdote Rafael era el hombre más seráfico del mundo, con solo pasar se llenaba la atmósfera de una serenidad inquebrantable, tan solo comparada con la santidad del Papa Juan Pablo II. Pese a que prefería la fe antes que otra cosa; al fin y al cabo, era un