Algo en nosotros

Hay algo en nosotros, no sé qué puede significar lo que está naciendo en mí. A simple vista parece aprecio y al mismo tiempo parece que hay algo más que un simple sentimiento y no me atrevo a reconocer. Me pregunto en silencio, ¿en qué momento ha despertado lo que creo que siento por ti?, además, siento que tú sientes lo mismo, por cómo te expresas, por cómo demuestras en tus gestos eso que necesitas que florezca de nuevo en este jardín bodrio, en los mensajes, en las fotografías que compartimos a diario; puedo decir que siento cierta displicencia de olvido.

¿Qué quieres lograr?, ¿qué buscas en mí?, me pregunto y hasta deduzco que sé lo que buscas.

Ambos somos conscientes que estamos a kilómetros de distancia pero que queremos sentirnos a centímetros ahora mismo. Sé también que quizá cuando nos abracemos al vernos, justificaríamos la hazaña de estas ausencias prolongadas, asimismo cumpliremos los anhelos que buscamos bajo el influjo de la clepsidra del tiempo.

            Me visto con la gala de tus recuerdos y revivo en cada historia mientras duermo. A diario sueño con hacerte mía y que gocemos como cuando ocurrió.  Sin embargo, ahora solo queda mezclarme con mi propia humedad y pensar en la posibilidad de volver a vernos alguna vez.

            Porque sé que te lastimé, sé que te has ido para no regresar y que solo son fragmentos de lo que ha quedado de nosotros. Te precipitas por obsequiarme lo que hubo entre nosotros y me quedo con lo que ya no tendré, esas imágenes son solo partituras de olvidos en pequeños fragmentos que se van distanciando poco a poco y que pronto desaparecerán.

            Aunque se inserte en mí la idea de volver a tocar tu piel y acariciar tu alma, sé que lo que menos quieres es que mis yemas arañen otros malos recuerdos.

Porque mis dedos alguna vez ya han merodeado cada horizonte de tu piel y tuve la intrepidez de probar el dulce néctar de tu lujuria en muchas oportunidades. Es más, mis caricias alimentaron tus gemidos a una inabarcable agonía de la necesidad, todo porque me introduje en ti para cimentar esta penuria de reencontrarnos.

De algún modo, algo bello quedó en nosotros, por eso hoy queremos de nuevo lo que ya tuvimos, porque pensamos en derramar sueños de lo que quisiéramos y que se derrumbe en todo lo que deseamos.

Es un extraño amor que necesitamos y quizá al mismo tiempo, solo son unas enormes ansias de olvido.

©2024 Marcos B. Tanis

Publicado por Marcos B. Tanis

De profesión analista, docente y magíster en auditoría en informática, amante de la lectura y ahora escritor. Tengo mis primeras novelas publicadas tituladas: Fragilidades del alma y Aquello que menos esperas I y II, además varios apresurados por salir de la oscuridad.

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